En esta histórica Casa entregamos un espacio cultural a Quintero, abierto a toda la comunidad, para dar a conocer y poner en valor el patrimonio familiar y la obra de Juan Downey, artista reconocido mundialmente, proyectándolos al futuro.

Queremos acercar la arquitectura y el arte a las personas, estableciendo una amplia conexión de la Casa Museo con la comunidad y otras instituciones similares en Chile y el Mundo, posicionándonos como un punto de encuentro cultural en la Región de Valparaíso. 

La Casa

Un poco de historia...

A partir de las primeras décadas del Siglo XX se desarrolla el Modernismo en arquitectura, que comienza con la Bauhaus, fundada por Walter Gropius en 1919, un estilo caracterizado por las formas geométricas puras, materiales lisos y líneas limpias. A partir de 1932 el modernismo europeo se extendió por todo el mundo, especialmente en los Estados Unidos.

David Downey admiraba a arquitectos modernos como F. Lloyd Wright y Le Corbusier, lo que se evidencia en la arquitectura moderna y de líneas puras de la casa que construyó en Quintero en 1935 para el veraneo familiar, hoy convertida en la Casa Museo Downey.

La construcción se hizo con bloques de concreto, técnica que él trajo a Chile. Los bloques fueron hechos con una máquina alemana que se instaló en el mismo sitio para construir la casa.

La terminación de las paredes de la casa siguió lo indicado por la arquitectura moderna de los años 30, un estuco blanco y liso.

Destaca la hermosa escalera de caracol, diseñada por David Downey, hecha con piezas de concreto preformadas, que sube por fuera de la casa hacia la terraza en el techo, ofreciendo una hermosa vista al mar.

Se colocaron pilares estructurales y una losa de concreto como techo de la mayor parte de la casa.

También se utilizaron piedras de la Cueva del Pirata para las terrazas de la entrada y el patio de atrás además del hall de entrada, las que fueron seleccionadas para cada lugar por Luisa, esposa de David.

En los años 80, durante una visita a la casa familiar, Juan Downey hizo un gran dibujo sobre la muralla de la sala principal, una de sus meditaciones, Convirtiéndose en un icono de la casa y un símbolo del contenido artístico que hoy queremos proyectar a toda la comunidad